domingo, 16 de diciembre de 2012

EL HOBBIT: UN VIAJE INESPERADO



En el día de ayer fui a ver la primer parte de la trilogía en la que se adaptó el libro de El Hobbit titulada El Hobbit: Un Viaje Inesperado y creo que llegó el momento de dar mi opinión al respecto. A diferencia de lo que ocurrió con El Señor de los Anillos, en donde había visto la película antes de leer los libros, en esta oportunidad el libro del Hobbit me lo había masticado ya en varias ocasiones, además que en lo personal, me pareció mucho mejor libro que Señor  de los Anillos, lo que me hizo entrar al cine con una marcada predisposición (lo cual es muy bueno a la hora de ver una película), aunque sin llegar a los exageradísimos niveles que suele tener mi amigo Berto a la hora de ver cualquier adaptación.

Creo que la clave está en esa última palabra “adaptación” o más específicamente en el “basado en”. Cuando se toma una obra para adaptarla, quien realiza el trabajo es muy probable que quiera tomarse “ciertas libertades” para tratar plasmar una parte de su ser en la misma.

¿Qué pasó en esta ocasión? La película inició con una escena espectacular pero completamente distinta al libro, sin embargo, al terminar de verla, tengo que decir que tuvo perfecta justificación en que, al contrario de Tolkien que escribió primero el Hobbit y luego Señor de los Anillos, al haber seguido el camino inverso existía la necesidad de “crear” un nexo entre ambas obras.

Después de esto comenzó la historia de El Hobbit en sí. Sinceramente al principio quedé sorprendido por la literalidad de la adaptación, era un calco del libro extrayendo incluso frases enteras del mismo y las geniales   canciones enanas. Esto duró hasta las partes de los Trolls (si bien hubieron un par de escenas agregadas, no estuvieron mal – de hecho una me pareció excelente- no se produjeron grandes cambios). A partir de esa parte, la literalidad se fue literalmente (valga la redundancia) al carajo y del libro solo quedaron las ideas, “las guidelines”, para encontrarnos con una historia contada de una manera completamente distinta. Con muchas alteraciones significativas y dándole un perfil más épico que el que tenía la historia original.

Si bien en lo personal, el producto final me gustó, (aunque no pude aislar completamente el hecho de haber leído la obra original para analizar la película fuera de ese contexto), en mi opinión los puristas van a putear y mucho.

Tengo que resaltar como aspectos positivos, el genial aspecto visual potenciado por el High Frame Resolution 3D con la que la vi (sinceramente impactante) y por el soberbio trabajo que se hizo sobre el personaje de Thorin, Escudo de Roble (tanto del actor como de los adaptadores). Tanto mis amigos, como los lectores habituales de mi Blog, saben que no siento un amor particular por esa raza, pero este personaje en la película me compró (cosa que no pasó en todo el libro o, para ser más específico, porque no es el Thorin del libro).



Puntaje Windirion 8/10.

2 comentarios:

  1. También la vi ayer, y en muchos aspectos coincido contigo. La idea que tenemos de Thorin en el libro frente a la que se nos vende en la película es muy distinta.

    Pero hay que reconocer que la peli es divertida.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Claramente es muy divertida, pero para disfrutarla tenes que abstraerte del libro.

      De hecho ya me llegó la primera crítica destructiva de la película de uno de mis amigos fanáticos de Tolkien más rádicales

      Eliminar