La primera aventura que volví a jugar es una ambientada en el clásico mundo de D&D. Lo que lo hace diferente de las aventuras de D&D que hemos jugado con anterioridad, es que finalmente comenzamos a usar el mapa con cuadriculas para los combates, volviéndolo un juego tactics en estas instancias lo que te hace meditar un poco mas las skills y dotes a elegir. En esta aventura soy un hechicero mitómano con mucho amor propio por su propia vida (muchachos, ustedes peleen que yo los miro desde la esquina XD).
Posterior a esta aventura, me prendí en la campaña de ARS mágica, muy lindo juego predecesor de Mago (uno de los juegos que más había disfrutado jugar) en donde suma muchisimo el roleo que organizó el Master vía foro en las instancias previas y posteriores de las aventuras. En este caso tengo a un PJ con una personalidad completamente diferente al de D&D: Alexander de Flambeu, quien de chico vio como su aldea fue quemada por unos sucios sucios Normando, que busca convertirse en el mejor espadachín de su era para vengarse y que, a pesar de tener grandes poderes mágicos en el área de Ignem, los regula debido que cuando los utiliza, las cicatrices que le dejó el ataque a su aldea vuelven a arder.
Como dije quede muy enganchado con ambas aventuras y espero pronto continuar con el roleo de las mismas.
A mi eso de jugar a rol con cuadraditos me mata...XD
ResponderEliminarDados papel e imaginación. No debería haber nada más. :P
Que se yo, hasta ahora siempre habíamos jugado como vos decís, dados, papel e imaginación; pero la verdad que en lo personal los juegos tactics siempre me gustaron y en D&D la verdad está muy clara la mecánica, con lo que resulta muy entretenido.
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